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La resina vegetal o resina CBD es una de las formas de consumo de CBD que están adquiriendo más relevancia en los últimos meses. Se obtiene a partir de un extracto de la famosa planta de cannabis o cáñamo y contiene altas concentraciones del cannabinoide cannabidiol (alrededor de 10% o más de CBD). La resina de CBD se produce mediante la extracción de los compuestos activos del cáñamo o la marihuana con un disolvente, como el alcohol, para obtener un concentrado rico en CBD.
La resina de CBD se produce mediante la extracción de los compuestos activos del cáñamo o la marihuana con un disolvente, como el alcohol, para obtener un concentrado rico en CBD.
¿Cómo se consume la resina CBD?
La resina CBD, popularmente conocida como hachís de CBD, tiene dos usos principales.
Fumar, es la manera más habitual de consumir la resina CBD. Tan sólo hay que desmenuzarla en trocitos y empezar a fumar envuelta en un papel para este uso. Hay quien la mezcla con tabaco, pero es más desaconsejable por el riesgo cancerígeno del tabaco.
Lo ideal es usar un vaporizador, que no quema la resina CBD y evita la inhalación combustible que puede ser perjudicial para los pulmones.
Otra de las formas de consumir resina CBD es como ingrediente de alimentos, especialmente dulces. Lo más sencillo en este caso es mezclarla con una base de mantequilla y fundirla para mezclar y elaborar galletas, bizcochos o pasteles.
Propiedades de la resina vegetal CBD
El CBD, o cannabidiol, ha sido objeto de numerosos estudios, muchos todavía en desarrollo. EEUU y Canadá son dos de los países donde se ha planteado su uso terapéutico de manera más avanzada. En la EU está permitida su comercialización, aunque no se use ampliamente a nivel terapéutico.
En todo caso, sus principales propiedades potenciales son:
- Relajante y ansiolítico. El CBD puede reducir la ansiedad y el estrés en personas que sufren trastornos de ansiedad, trastornos de estrés postraumático y otros trastornos relacionados con el estado de ánimo.
- Analgésico. Puede reducir la sensación de dolor en el cuerpo y, por lo tanto, puede ser útil para tratar dolores crónicos como el dolor de espalda, la neuropatía y la fibromialgia.
- Antiinflamatorio: El CBD puede reducir la inflamación en el cuerpo, lo que lo convierte en un candidato prometedor para tratar enfermedades inflamatorias crónicas como la artritis reumatoide y la enfermedad inflamatoria del intestino. Aunque no existe todavía un respaldo médico suficiente.
- Anticonvulsivo. El CBD puede reducir la frecuencia y la intensidad de las convulsiones en personas con epilepsia.
Es importante tener en cuenta que se necesitan más estudios para confirmar estas propiedades potenciales del CBD y determinar las dosis y formas adecuadas de administración para cada condición.
Además, es importante hablar con un profesional de la salud antes de usar productos de CBD como tratamiento para cualquier afección médica.
Diferencia entre CBD y marihuana
Hay que diferenciar entre el CBD o cannabidiol y la marihuana. El primero es una sustancia específica autorizada en la UE que se obtiene del segundo, que por el contrario no está permitido comercializar de manera legal.
Mientras que la marihuana está considerada como una droga adictiva con efectos negativos en la salud a largo plazo, el concentrado de CBD está permitido en la UE. Efectivamente tras un fallo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), de noviembre 2020, se permite si se cumplen las siguientes especificaciones:
“… se autorizan el cultivo, la importación, la exportación y el uso industrial y comercial (fibras y semillas) de las variedades de Cannabis sativa L. que cumplan los siguientes requisitos:
- que el contenido de delta-9-tetrahidrocannabinol de estas variedades no sea superior al 0,20 %;
- Que la determinación del contenido de delta-9-tetrahidrocannabinol y la toma de muestras a fin de efectuar esta determinación se lleven a cabo según el método [de la Unión] que figura en anexo…”
CBD frente al THC
Como hemos visto, el CBD es uno de los muchos compuestos químicos presentes en la planta de cannabis. Pero a diferencia del tetrahidrocannabinol (THC), que es otro cannabinoide común, no tiene efectos psicoactivos y no produce la sensación de «estar colocado» que se asocia con el uso recreativo de la marihuana y al THC. En cambio, es el responsable de los efectos relajantes, analgésicos y antiinflamatorios anteriormente mencionados.
